domingo, 10 de abril de 2011

Perdida

Ella siempre miró con miedo a las demás mujeres cuando se acercaban a él, aunque fueran simples amigas o incluso aunque esas mujeres tuviesen parejas.
Si, quizás tuviese un miedo atroz y eso la hacía ponerse celosa en cualquier situcación, sentirse mal e incluso pagarla con él.
Siempre la decían que cuando dos personas se quieren, tienen que confiar el uno en el otro porque si no hay confianza, no hay nada.
Pero ella confiaba en él, en quién no confiaba, era en ella misma. Se pasó la vida sabiendo que tenía que hacer para ser la mejor hija y tener a sus padres felices, para ser la mejor estudiante y que sus profesores la adoraran, la mejor hermana y que sus hermanos la quisieran, incluso la mejor novia para conseguir el amor de cualquier hombre... Y ahora, la tocaba ser la chica perfecta para el chico perfecto.
Y por una vez, se sentía perdida.

1 comentario:

  1. si te pierdes en tí misma... búscate mejor
    la perfección aburre, si preguntas por mi opinión, un par de defectos por día no vienen nunca mal...

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