jueves, 28 de abril de 2011

El amor

Uno aprende de caídas, al menos es lo que quiere creerse, porque sin realmente aprendieramos de ellas, no volveríamos a enamorarnos nunca.
El amor siempre ha sido la mayor caida de todas, y aun teníendo todos los huesos y musculos rotos, volvemos a enamorarnos, nos curamos y volvemos a ver el lado más dulce de la vida.
Es increíble como algo tan fuerte, puede llegar a ser lo más maravilloso y lo más temido por todos.
Porque cuando te enamoras, todo, absolutamente todo, gira en torno a esa persona. Los besos son los mejores que has probado, aunque haya habido mejores, los abrazos los más cálidos e incluso las palabras...
Pero siempre es un prologo anunciando lo más amargo de la vida.

2 comentarios:

  1. Mi querida amiga, yo creo que es absolutamente lógico que lo más hermoso pueda convertirse en lo más horroroso, según el valor de la apuesta es el valor de la ganancia. Y brindo porque sea así, pues cuando te recuperas de una desdicha amorosa, parecer renacer con una fuerza insólita.
    Un beso.
    Humberto.

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  2. ayy nena tú si que sabes! enamorarse debería considerarse un deporte de riesgo, en el que a veces sales ganando, y ganando, y ganando, y no te caes, al menos por el momento.. y yo mañana llevaré ya 15 meses sin apenas tropezar! :)
    eh tía, pues si ese texto de nada te parece romántico y esas cosas q dices tú.. léete los primeros del blog... y prepárate porque tengo algunos preparados que cágate lorito ^^
    jajaja ayyyyyyyyy(LLLLLLLLLLL) como te loffeo coño!

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