miércoles, 30 de marzo de 2011

.

- Estoy cansado de ti, de tus tonterías de niña pequeña, se acabo, esto que nunca hemos tenido se acabo... ¡Estoy harto de quererte y no ser correspodido!
Se giró para marcharse, pero ella lo agarró del brazo.
- Te quiero...
La miro sin creerse todavía lo que había escuchado.
- ¿Qué?
- Lo que has oido, que te quiero... y por favor no me hagas volverlo a repetir.
- Tú no quieres a nadie que no seas tu misma.

Después de tanto tiempo detrás de ella, de perdonarla sus rabietas, sus enfados sin sentido. Después de tantas noches en vela con el corazón en un puño, esperando, solo esperando.
Tanto tiempo diciendola lo mucho que la amaba y suplicandola siempre, un simple "te quiero" que le hiciese albergar esperanzas, y ahora, cuando todo se acababa, por fin escuchaba esas dos palabras.
- Te quiero, siempre te he querido...
- Pero...
- No, por favor no digas nada, ahora dejame hablar a mi. Llevo toda mi vida con hombres que me han hecho sufrir, llorar y sentirme sin ganas de vivir, pero entonces llegaste tú, con tu dulzura y tu amor... Y pensé que si quería conservarte, debería ser más dura, hacerme la dificil. Pero no me di cuenta de que no eres como los demás.
- ...
- Será mejor que me marche...

Y fue entonces cuando la besó, olvidandose de todo, la beso...

1 comentario:

  1. No hay nada mas hermoso en la vida que la palabra "Te quiero"...
    Me ha encantado encontrar tu blog
    Un besito volveré, Rosa

    ResponderEliminar